sábado, 10 de julio de 2010

Nada importa


Volví a caer
Cada trampa, cada mentira, cada conveniencia
Hipocresía que envenenan en el camino el alma mía
Es triste y doloroso cuando no puedes dar
Por lo menos una sencilla historia de verdad
Caí en el lado oscuro de la vida
Donde no existe al nacer el amor que guíe la vida
Salvo los gritos de la hipócrita agonía
Celosa, enferma, mísera, sin memoria, sin sentidos
Se pudre matando sin piedad en la ventaja de la oscuridad
Me perdí en este laberinto de maldad
Una vez mas comí del oscuro aliento de la necrofilia
Sentí que podía amar la profunda oscuridad
Y me ha terminado de acecinar
Con su ya clásica sonrisa sarcástica de maldad
Perdí una vez mas y el tiempo se agota mas
Ya no hay oportunidad de ignorar la decisión final
Dejarme llevar al final y confiar en que no moriré mas
O regresar a la sombra de mi ingenuidad
Odio el dilema de esta crueldad
No existe ni bien ni mal
Pero siento la necesidad
Saber que hay mas que se puede vivir
En la memoria de la eternidad
Saber que se puede amar
Que no existe el hambre, la agonía ni la tristeza de la soledad
Dejaré de mendigar en esta tierra
Dejaré de pensar que puedo amar a cualquiera
Tal vez sea necesario romper toda la moral
Que me ata a la necesidad
Voy a romper los límites de esta sociedad
Desangraré quizá por una eternidad
Comeré de la paciencia celestial
Tocaré el sonido del adiós
Dejaré que tu sonrisa naufrague en el olvido
Aprenderé a morir sin gritar que necesito
Me cobijaré con los pensamientos vírgenes
Con las caricias sobresalientes con los placeres
Que escapan de la vida y la muerte
Nos soy parte de la historia de hipócritas
De la ignorancia de científicos, de la creencia del pensar
De la condena de esta especie que vive y muere
Sin rasgar siquiera un poco el universo que le rodea
No hay importancia en esta palabra
Que la del universo infecto que la crea
Ya me quiero ir, este cielo es un sueño
Ya no quiero besar la muerte de tu mente
Estoy cansado de esta estructura aprisionadora
Regresaré de nuevo al maravilloso misterio de la noche
Al orgullo de crear las ondas sonoras que crean las ideas
Me integraré al futuro que me aplastará
Regalándome prontamente la muerte
Me entregaré al seguro último desaliento de la muerte
Al coqueteo del descanso eterno
Si me recibes tan clara como la vida
Será esta la última partida
La última agonía por fin será realidad
Mi deseo por construir la espera
Y ser parte de la eternidad finalmente encontraré
En tus brazos la anhelada paz
De donde nunca debí salir
Regresaré contigo amada muerte mía
Al fin junto a ti
Después de esta triste aventura de la vida

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